Tengo la suerte de que la esposa de uno de los que pescaron la raya gigante es docente y, si bien trabaja en otra escuela, viaja conmigo en el mismo transporte. Somos cinco en total las que lo compartimos. Mario, su marido, tuvo la genial idea de convidarnos un trozo de lo que pescó. ¡Hasta Norma, nuestra chofer, tuvo un trozo!
Me dijeron que con esta carne se pueden hacer milanesas, empanadas, tarta o albóndigas. Lo más aconsejable son las milanesas, pero yo hice empanadas y como me quedó relleno, voy a cocinar una tarta.
Las empanadas, riquísimas. ¡Olvidé sacarles foto!
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